Ayer fui a bailar contact a un estudio de danza y... no sentí nada. Me pregunto de qué se trataron los últimos 7 años de mi vida, corporalmente hablando. No siento deseos de bailar, ni de moverme ni de explorarme. Mis verdades ya no están en los huesos y los músculos, son inmateriales. Paradójicamente siento la percepción más abierta que nunca. Extrañas sensaciones. Sin mucha voluntad para analizar lo que es. Más definición, más foco. Más identidad. Listo.
Habré estado tantos años bailando para delimitarme a través del cuerpo? Recuerdo la desesperación, la urgencia de sentir. Y no poder... Hoy me queda una herida en la ingle y pienso: qué siginificará esta calma en la que naufrago hoy. La verdad es que no tengo ganas de perder energía averiguándolo.
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