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miércoles, 1 de agosto de 2007

Trabajo

Las organizaciones campesinas de la Cuña Boscosa Santafesina han alcanzado en los últimos años una notable madurez, que se refleja en el vigor de su incidencia pública. Agrupados en torno a diversos temas, productores y productoras han tomado un liderazgo cada vez más activo en un camino no exento de dificultades. “Hoy no tenemos miedo ni de sentarnos a discutir con el Gobernador”, asegura Teodoro Suárez, vocero de la Unión de Organizaciones de Pequeños Productores de la Cuña Boscosa.

Son las 9 de la mañana, unas 15 personas están reunidas en torno a una mesa larga, mate de por medio. Los temas para discutir son muchos y diversos, asique entre todos definen un temario. Se trata de una de las reuniones mensuales del grupo conductor de la UOCB, organización de segundo grado que nuclea a siete organizaciones: Apiagro de Tartagal, la Asociación de Apicultores, el Fondo Rotatorio, la Organización de Teleras e Hilanderas, la Comisión de Tierras y Recursos Naturales, grupos vecinales y grupos organizados de la localidad de Fortín Olmos. En total son unas 500 familias que están trabajando organizadas para buscar soluciones a sus necesidades, comunes a toda la región.

La UOCB es la organización zonal de pequeños productores más grande de toda la provincia de Santa Fe. El antecedente de esta organización fueron una serie de nueve encuentros de campesinos de la Cuña impulsados por FUNDAPAZ durante 2002 y 2003, destinados a la capacitación de dirigentes. El intercambio de experiencias y el aprendizaje que surgió de estas reuniones fue la semilla: los dirigentes comenzaron a pensar en una organización que los englobase a todos, y que permitiese fortalecer su capacidad de incidencia en la región. Fueron muchas las discusiones sobre la viabilidad de una entidad de esa magnitud, por los costos que implicaría sostener su estructura. Finalmente, en 2005, se bautizó a la organización con su nombre actual.

Actualmente, la UOCB está en pleno crecimiento, hecho que es fácilmente apreciable en encuentros de la conducción como el de hoy. En los últimos meses, por ejemplo, han mantenido reuniones con diferentes referentes del establishment político, incluido el candidato a gobernador Hermes Binner y el actual intendente de Vera, Raúl Seco Encino, a quienes pudieron manifestarles sus principales preocupaciones y líneas de trabajo. Hoy es el turno del justicialista Héctor Triniaghi, candidato a jefe de gobierno local.

“Nuestra organización no tiene una línea política partidaria –explica Suárez, representante de la Comisión de Recursos Naturales y Tierra- sino el objetivo de crecer y gestionar. Debemos presionar a todos para presentar nuestra organización y gestionar proyectos”.

Su compañero Atilio Benítez, de Apiagro, se explaya aún más: “Nosotros mismos podemos tener ideologías políticas diferentes, pero todos trabajamos por el bien de los pequeños productores”.

Antes de la llegada de Triniaghi, se repasan los temas a discutir y, sobretodo, las demandas que la Unión planea hacerle al potencial nuevo intendente. La consecución de un local o terreno para una sede propia encabeza la lista. Este es un punto clave para los dirigentes: necesitan un espacio para trabajar, realizar sus reuniones y exponer sus trabajos para la venta. Pero lo que es más importante, necesitan un lugar que los represente, adonde cualquier persona pueda acercarse para conocerlos y colaborar con su trabajo.

El candidato llega acompañado de tres aspirantes a concejales, entre ellos el ex intendente Luis García. Luego de las debidas presentaciones, se discuten las necesidades de las organizaciones que integran la UOCB: caminos, viviendas rurales, fondos para la construcción de talleres de hilado, salas de extracción de miel... Trigniaghi, en plena campaña proselitista, asegura que la municipalidad contará con un monto de 500.000 pesos provenientes de Ingresos Brutos de la Nación. “Asique fondos hay –enfatiza- Quédense tranquilos que la intención es hacer algo”.

“Yo soy un empresario laburador, nací de muy abajo y soy como ustedes –exclama- Sólo que por circunstancias de la vida ahora soy candidato. Soy un ejecutor y quiero cambiar la situación de Vera”.

“Si el campo anda bien el pueblo anda bien”

La falta de aplicación de las leyes de adjudicación de lotes fiscales y la creciente desforestación de la Cuña fueron otros de los temas que se discutieron durante la reunión. “Si hoy le damos una posibilidad a las familias pobres, dejarían de cortar inmediatamente –sostiene Suárez- Esta organización ha venido hablando con el Gobierno y la Secretaría de Medio Ambiente. Sin embargo se sigue desmontando”. El dirigente agregó que son las grandes empresas que se llevan las ganancias, quemando el monte o viviendo a expensas de los pequeños productores y hacheros de la zona. “Yo cobro trece pesos la tonelada de leña. Imagínese”, ilustra Carlos Aquino, de la localidad de La Gallareta.

Los dirigentes de la UOCB insisten con su postura, alegando que para el Gobierno local el campo en general está relegado, y sólo se trabaja en mejorar las condiciones de vida de la gente en la ciudad. “Estamos hablando, en 2007, de cosas básicas como luz y caminos”, concluye Suárez.

Luego de las promesas electorales, todos se despiden cordialmente. “Este va a ser un municipio de `puertas abiertas´ - dice Triniaghi. Rafael Faulkner, de Tartagal, no pierde el tiempo: “Entonces pongamos fecha para una audiencia después de las elecciones”.

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